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La normalidad en el mundo de los sueños es que nuestro cuerpo físico, se regenere en el sueño y despertemos llenos de vitalidad. Pero a veces esto no sucede, despierto cansada, sin fuerza ,a veces recuerdo sueños pesados (pesadilla), otras simplemente no recuerdo nada . La sensación no es agradable, o a veces de lleno, me despierto con sobresalto, susto o miedo. Son distintos síntomas de que algo esta pasando en el mundo de los sueños.

Cuando dormimos nuestro cuerpo físico descansa, y se despierta nuestro otro vehículo o cuerpo del mundo de los sueños o cuerpo astral . Este cuerpo que soy yo misma en esa dimensión, también saldrá a tener sus propias experiencias; si yo no sé administrar mi cuerpo astral, él igual saldrá y su instrucción será inconsciente de acuerdo a como este mi mundo emocional, es decir, si me acuesto con dolor o pena , mi yo del mundo de los sueños irá también a vivir esas experiencias de pena y dolor a un lugar de la cuarta dimensión que conocemos como bajo astral. Y si me acuesto en agradecimiento y amor también mi yo irá a vivir esas experiencias al alto astral.

Resumen : Lo que conocemos como ataque onírico seria mi otro yo astral ,en el bajo astral (expuesto a todos los seres que lo habitan) durante el sueños. Cómo lo reconocemos: me despierto cansado, tengo pesadillas, insomnio o despierto con sobresaltos entre otros.

Ejercio a realizar antes de dormir en 7 pasos

Paso 1:Relajo mi cuerpo físico armonizando mi respiración.
Paso 2: conecto con la energía de la madre tierra que ingresa por mis pies.
Paso 3: conecto con la energía de padre sol que ingresa por coronilla.
Paso 4: ambas energías se unen en mi corazón y las expando firmando una burbuja de luz a tu alrededor.
Paso 5 : invoca a energía de Arcángel Miguel o Rayo azul a que selle tu campo energéticos.
Paso 6 : invoca a energía de Rayo violeta o Arcángel Zadquiel . Que limpie y trasmute.
Paso 7 : invoca energía de Rayo Rosa o arcángel Chamuel, que llena de amor incondicional.
Es muy importante ir sintiendo las energías que estás invocando en cada uno de los pasos, es decir, alinear tu mente con tu emoción.

Por Ruth Martel Mora.